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Qué placer son los masajes, y mucho más cuando los recibimos de esa persona especial, en un momento mágico. Si quieres sorprender a tu amor o hacerte unos mimos únicos, aquí te contamos cómo hacer tus propios aceites caseros para masajes terapéuticos. |
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El uso de aceites para realizar masajes cumple un doble propósito: por un lado, favorece el desliz de los dedos y las manos por la piel, evitando roces e irritaciones incómodas que sólo perturban lo especial del momento.  Por otro lado, el uso de aceites durante los masajes es una manera ideal de favorecer su penetración en la piel. Esto hace que se hidrate, sea más elástica, se tonifique, y se aproveche los beneficios propios de las hierbas y extractos de cada aceite. Para cada aceite de masajes, necesitas una botella de cristal bien lavada y con cierre hermético (o con válvula o gotero, pero con buen cierre para evitar que el aceite se airee). En lo posible, utiliza una botella o frasco de color opaco, para que la luz no altere la integridad del contenido. También es buena idea mantener los ingredientes a temperatura de ambiente o apenas tibios al momento de la preparación, para lograr una mejor emulsión o integración.  Otros elementos necesarios son un gotero y una espátula plástica o de madera para mezclar los ingredientes, como los "bajalenguas" de los que usan los médicos para revisar tu garganta. También un mortero, potes o frascos de vidrio, filtros y géneros. Para dar calor a los ingredientes y preparaciones, lo mejor es envolver los contenedores entre tus manos, sin usar calor excesivo.
En la botella, mezcla 500 cc de aceite de almendras dulces con unas 10 a 15 gotas de aceites esenciales de lavanda, bergamota, sándalo, manzanilla y rosas. Estos aceites esenciales favorecen la relajación muscular y también propician la relajación mental. Coloca los ingredientes en el frasco, cierra bien, y agita suavemente para integrar. Luego, remueve o agita suavemente antes de cada uso.
El hipérico, o hierba de San Juan (Hypericum perforatum) es ideal para tratar contusiones, contracturas, golpes y dolencias, y resulta en un ingrediente especial para masajes relajantes. Para preparar este aceite, tritura unos 300 gramos de sumidades floridas de hipérico para llevarla a polvo, o todo lo que puedas reducirla. Luego, mézclalo con 750 cc de aceite de oliva (deber cubrir los sólidos) y cierra el frasco, dejándolo en maceración por 40 a 45 días al sol y a temperatura constante (dejalo en la ventana para aprovechar el sol lejos del frío exterior). Puedes agitar suavemente o remover a diario, para una mejor hidratación y maceración del hipérico. Luego filtra, y conserva en un contenedor de vidrio bien cerrado.
Para hacer este tercer aceite para masajes, mezcla medio litro de aceite de oliva con 8 gotas de aceite esencial de lavanda, 7 gotas de aceite de romero, 7 gotas de aceite de enebro, 3 gotas de aceite esencial de clavo de olor, y 15 gotas de tintura de harpagofito. Remueve bien, deja integrar toda la noche, y al día siguiente ya puedes comenzar a utilizarlo. |
Aceites para masaajes Como hacer tus propios aceites para masajes Cuando realizar un masaje Diferencia entre masaje erotico y terapeutico
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